Tuesday, October 09, 2007

Falsa adopción: después de dos años, pueden tener consigo de manera definitiva a su hijo.

Un nene de dos años fue devuelto a sus padres biológicos, luego de haber sido robado de sus manos tras su nacimiento del 29 de septiembre del 2005 en una clínica de Santiago del Estero; los apropiadores habrían falsificado la firma de la madre para simular una entrega voluntaria.
En febrero de este año el Superior Tribunal de Justicia de Santiago del Estero falló a favor de la familia biológica. Pero recién el pasado 4 de septiembre la Corte Suprema de Justicia dictó sentencia firme y por decisión unánime de siete ministros. La causa, caratulada "Martínez, Marcela María de Luján y otro s/ guarda con fines de adopción del menor Francisco Agustín Ibarra”, que reviste ahora carácter definitivo, dispuso que Francisco volviera con sus padres. De este modo se resguardó el derecho de identidad del hijo de la familia Ibarra, pero, para esto, tuvieron que tolerar que un equipo interdisciplinario los estudie durante largo tiempo, lo cual fue necesario para establecer que estaban en condiciones de contener afectivamente al nene. Esto resultó un disparador para la reciente sentencia de la Corte.
El caso fue conocido por los medios gráficos en mayo del 2006, cuando una mujer, Alejandra Ibarra, denunció que le habrían robado a su hijo, Francisco. Según su testimonio, su esposo, un trabajador agrícola, estaba de viaje trabajando en una cosecha cuando el robaron a su séptimo hijo. Ella se sentía mal y había ido a una clínica privada para que le hicieran unos controles. Muy humilde, había tenido acceso al centro de salud con ayuda de una abogada que estaba organizando la adopción del bebe de una amiga suya, que le habría ofrecido a Alejandra en varias ocasiones dar a su bebé. También le había dicho que debía someterse a varios controles por tener una enfermedad contagiosa, lo que le resultó extraño. En la salita de su barrio nadie le había dicho que padecía una enfermedad. En una nota realizada por el diario Página 12 en mayo del 2006, Ibarra contó que aún no sabe como terminó sobre la mesa de operaciones. Lo cierto es que le hicieron una cesárea y luego un empleado del Resgistro Civil apareció con el documento del recién nacido y le quería hacer firmar un consentimiento para entregar a su bebé, pero ella se negó. Luego habría aparecido un hombre porteño en la habitación que cargaba a su hijo en brazos, el cual le preguntó si había firmado. Ella le contestó que no, pero el hombre se lo llevó igual.
A los dos días en Santiago del Estero se abrió una causa por la adopción de Francisco, pero en el expediente, según el diario Clarín, sólo aparecía un certificado de buena conducta y no lo se les exige a todos los adoptantes: "un informe socio ambiental ni perfil psicológico".
Luego de diversas investigaciones, se descubrió que el recién nacido estaba en un country de la localidad de Escobar en manos de un matrimonio porteño, el cual aseguraba que tenían al niño con el consentimiento de la madre. En ese momento, una jueza dictaminó la restitución de su hijo y Alejandra Ibarra viajó desde Santiago del Ester para reencontrarse con el, pero no lo encontró. La causa, por la cual el padre de Francisco aseguró desde un primer momento que había que investigar las complicaciones adyacentes a la justicia que ayudaron a la posibilidad de una supuesta adopción legal, fue apoyada por diferentes organismo de Santiago del Estero, por la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación y del Comité Argentino de Seguimiento y Aplicación de los Derechos del Niño (Casacidn), presidido por Estela Carloto y por el abogado Juan Pablo Gallego.
Gallego afirmó que "Deben sustanciarse a fondo las investigaciones criminales relacionadas con el dudoso origen de la guarda del niño otorgada a terceros". A su vez, Nora Schulman, directora ejecutiva de Casacidn, quien abogó desde un comienzo por la familia biológica declaró: "La decisión de la Corte pone fin a la situación de indefensión a la que se vino sometiendo al niño Francisco, al obviarse a lo largo de las actuaciones, la aplicación de toda la normativa de la Convención sobre los Derechos del Niño, en particular en lo que hace a su Derecho a la Identidad”
Lo cierto es que los secuestradores pudieron mantener a Francisco con ellos nada más ni nada menos que durante los primeros ocho meses de su vida, pero la pesadilla para sus papás recién ahora está terminando, después de dos años. Página 12 aseguró en mayo del 2006 que con este caso "se probaría el funcionamiento del tráfico de chicos en Santiago del Estero", y en Clarín, en el mismo mes, fue publicado que desde la subsecretaría de Derechos Humanos de Santiago del Estero se les habría declarado que con la resolución de esta causa se desarmaría "un sistema de robo organizado".
La pregunta es, ¿hace falta que familias enteras sufran para que se decida darle mayor fuerza a las investigaciones de estas catástrofes con el fin de que se desarme un "sistema" de tráfico de SERES HUMANOS?


Este artículo lo publiqué también hoy en la revista digital TodasTusCosas.com:
http://www.todastuscosas.com/?p=303

1 comment:

Anonymous said...

Haber ...

¿Porque creerle a la madre biologica y no a los padres adoptivos? ¿Ah?

Si te hubieras puesto a investigar un poco más la causa sabrías que ibarra NUNCA PRESENTO PRUEBAS del hecho, más que el testimonio de ella, caso contrario de los padres adoptivos que tenían muchisimas pruebas que mostraban la realidad: Ibarra MIENTE.
En este momento solo recuerdo una y es que ibarra decía que la había hecho ingerir unas pastillas, cuando nunca en los nacimientos de bebe se usa esa pastilla porque de lo contrario nunca naceria el bebe.

Con esa prueba nomas se puede dar el caso resulto.
¿Que paso? La siempre corrupa provincia de santiago del estero obvio todo eso y como quieren "el voto de los negros" le devolvieron el bebe a una familia donde a sus hijos los maltratan, los hacen trabajar, duermen 8 en una sala de 2x2 ...

Haber si DEJAMOS DE HABLAR SIN SABER DALE?