Friday, September 25, 2009

Proyecto de ley porteño de aborto no punible sigue en marcha

Tick tack tick tack. El tiempo no para, y mientras se acrecienta de modo incesante la taza de mortalidad por abortos clandestinos mal realizados en el país, son múltiples las trabas que se ponen en el camino para interrumpir el embarazo incluso a aquellas mujeres cuyos casos están contemplados como "abortos no punibles" por el Código Penal de la Nación.

En este contexto, la Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires está tratando un proyecto de ley con el fin para aclarar algunas cuestiones sobre los abortos no punibles, y evitar así los peligrosos clandestinos, que conforman la principal causa de mortalidad de mujeres embarazadas.

La iniciativa obtuvo el miércoles dictamen favorable de mayoría en la Comisión de Salud, pero todavía le queda mucho por andar. Tuvo el aval de para seguir el camino legislativo que precisa transitar (es decir, obtener dictamen en dos comisiones más) para llegar luego al recinto y ser votado por el pleno del cuerpo.

El objetivo del proyecto, tal como indica su artículo primero, es regular “el procedimiento a llevar a cabo por los/as médicos/as de los establecimientos del sistema de salud de la Ciudad de Buenos Aires, para la atención y práctica de abortos no punibles contemplados por los incisos 1º y 2º del Artículo 86 del Código Penal de la Nación, a fin de garantizar la salud integral de las mujeres”.

Los incisos en cuestión (Hacé click aquí para leerlos) detallan que los casos de aborto no punibles son aquellos en los que una mujer embarazada que es “demente o idiota” fue violada, o en los que corre peligro su vida.

Lo que hace el proyecto en tratamiento es, simplemente, visibilizar que la interrupción del embarazo no requiere autorización judicial en dichos casos. Tal es así que el Código Penal en ninguno de sus párrafos dictamina que se precise ese tipo de aval.

Sin embargo, en los hospitales públicos, por temor a consecuencias legales, se termina pidiendo esta autorización. Este proceso burocrático demora tanto que en muchos casos imposibilita la interrupción del embarazo y pone en riesgo la vida de la mujer.

El proyecto contempla también los casos en que los y las profesionales de la salud, por objeción de conciencia, no deseen participar en la operación. Así lo dice el artículo 7º: “Aquellos/as médicos/as que manifiesten objeción de conciencia para efectuar las prácticas médicas alcanzadas por la presente, deberán hacerlo ante las autoridades de los centros asistenciales a los que pertenezcan y quedarán excluidos de participar en cualquiera de los procedimientos previstos en esta ley".

Iniciado el debate en la Legislatura en 2008, esta directiva es la conjugación de ótras cuatro que apuntaban en la misma dirección, presentadas por las diputadas Gabriela Alegre (Diálogo por Buenos Aires) y Diana Maffía (Coalición Cívica), y los legisladores Pablo Failde y Juan Cabandié (ambos del Frente para la Victoria).

Votaron a favor del proyecto las diputadas Diana Maffía, Gabriela Alegre, Alicia Bello (Identidad Porteña) y María Eugenia Rodríguez Araya (PRO, con disidencia parcial) y el diputados Fernando Cantero (Autonomía con Igualdad, también en disidencia parcial). Votaron en contra las legisladoras del PRO Mónica Lubertino, Lidia Saya y Diana Matínez Barrios, y el legislador Roberto Di Stéfano. También votó en contra la legisladora Dora Mouzo (Bloque Peronista).

Es preciso aclarar que aquí no están en juego los valores o principios de cada uno de los miembros de la comisión, no se está debatiendo si despenalizar o no el aborto, ni si extender el alcance de las destinatarias del aborto no punible.

Desde el PRO, señalan que el texto de ley pretende modificar el Código Penal de la Nación y que la Legislatura no tiene competencia para ello. Pero lo cierto es que el proyecto no modifica el Código en absoluto, solo pretende cubrir un vacío legal que trae consigo consecuencias fatales.

Su próximo destino, la comisión de Mujer, Infancia, Adolescencia y Juventud, y luego la comisión de Justicia.

Aborto legal en el hogar

La línea telefónica "Aborto, más información, menos riesgos" brinda información sobre cómo acceder a un aborto seguro en casa mediante un medicamento legal llamado Misoprostol. Esta información es publicada por la propia Organización Mundial de la Salud y la Federación Latinoamericana de Sociedades de Obstetricia y Ginecología. Así también, indican que es fundamental respetar estrictamente los pasos para no tener complicaciones. La línea telefónica se ocupa de comunicarlo es (011) 156 664 7070.

Estadísticas

Según el Ministerio de Salud de la Nación, se realizan alrededor de 500 mil abortos por año, y su mayoría se da fuera del marco legal. De este modo, alrededor de 68 mil mujeres ingresan a los hospitales públicos por complicaciones surgidas tras abortos clandestinos e inseguros. Mueren así alrededor de 100 mujeres anualmente por esta causa, constituyéndose como la principal causa de muerte de mujeres embarazadas.